El hecho se registró en el barrio El Silencio, al suroccidente de la ciudad, cuando Alberto se encontraba en un local de comidas rápidas comprando una salchipapa, a la vez que hablaba por teléfono, cuando llegaron los delincuentes a bordo de una moto e intentaron quitarle el teléfono.
Sin embargo, Zabaleta se rehusó a entregar el teléfono e intentó desarmar al bandido quién lo baleó.
«Los hombres llegaron en una moto, el parrillero se bajó y forcejeo con él, pero el celular cae al piso. En ese momento uno de los trabajadores del local agarró una silla y se la pegó al atracador, fue entonces cuando el hombre saca el arma y hace cinco disparos, pero solo le logró dar uno en la pierna», narró un testigo.
La víctima fue traslada a la Clínica Bautista donde es atendido.